29 Jul Ilusionémonos, soñemos

Hace rato que no escribía, por distintos factores y motivos, pero algo que paso en estos meses fue que en varias ocasiones me ilusioné, soñé, y mucho; no todo salió, no todo fue como quería, solo sé que paso lo necesario, lo que me hace llegar al día de hoy.

De niños soñamos con todo, mezclamos historias, nos creemos que somos parte de esa historia, y no hay cosa más humanamente satisfactoria y totalmente plena que esa felicidad infantil, esa inocencia que se ilusiona, que todo le causa admiración, que sueña con todas las posibilidades, y nada está mal, nada es incorrecto, todo es posible. Volvamos a esa inocencia.

Estoy consciente que como adultos debemos seguir normas, reglas no escritas , seguir protocolos  y demás estándares, que no necesariamente son reales, y que no son garantía de absolutamente nada, probablemente son un camino gris que nos lleva a más obscuridad, a apagar nuestro ser, nuestras mentes, nuestra creatividad , a envolvernos en mundo consumista, competitivo, avaricioso; nos muestra mundos alternos al que creíamos que seriamos, sé perfectamente que no todos podemos ser astronautas o presidentes de un país, pero si podemos estudiar de constelaciones, de estrellas, de mundos paralelos (por muy loco que sea para tus papás o amigos), y también podemos ser agentes de cambio dentro de nuestra sociedad, empezando en nuestro edificio, en nuestra calle, en nuestra comunidad.

Busquemos ser personas que se ilusionen que sueñen, pero sobre todo que hagamos soñar, que seamos puentes de situaciones positivas, que podamos crear, que podamos admirar un mundo distinto, llenos de alternativas posibles, que, para los que tienen hijos, puedan estar de cierta forma más tranquilos con el mundo que les estamos ofreciendo, que no todo es malo, que podemos hacer cambios, y todo nace en nuestras cabezas, que si lo soñamos podemos hacerlo posible, probablemente no de la forma como lo concebimos en un inicio, puede ser mejor.

Cada día nos llenamos de noticias malas, de notificaciones competitivas, también nos toca enfrentarnos a muros que no son fáciles de escalar, o quizá no son escalables, y eso no tiene que ser un factor de decisión o no es algo absoluto, hay más caminos, hay más formas de llegar a nuestro objetivo; así que  todo lo que no nos aporta es basura, no nos llenemos de eso, hay que soltar, hay que aceptar, y eso puede ser el paso más difícil, porque si aceptamos lo que somos y tenemos podemos crear, podemos hacer, podemos soñar, y ser esa versión que  de mi yo infantil, en mi yo adulto, y el mundo lo agradecerá.

Busquemos la libertad, encontremos lo que queremos, movámonos en búsqueda de como materializar lo sueños, esos que nos ilusionaron, los que nos dieron energía e impulso, que nos movió a hacer cosas y pasar situaciones adversas, distintas, esas que nos satisfacen, que nos hacer ser YO, y nunca dejemos de ilusionarnos, de soñar, de ser niños.

“La gota más pequeña en el océano, puede causar una ola de emoción.”