REINVENTARSE.
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REINVENTARSE.

Dice la definición (una de las tantas que existen): Rehacer completamente su vida una persona, en especial en el ámbito laboral. Volver a inventar.

Partiendo de definición, en la actualidad esté probablemente muy de “moda”, o solo es el ambiente en el que me muevo, lo que leo, lo que veo, no lo sé, lo que sí sé, es que existe. Y nos alcanza en un cierto momento de nuestras vidas, ¡y debemos hacerle caso!

Creo que como muchos lo dicen o lo escriben, todos los días son un buen momento de reinventarse, redefinirnos, pero creo que llega una época en la que definitivamente es tajante la necesidad de hacer cambios radicales, pueden presentarse de muchas formas, como el día que uno decide casarse, cuando se decide tener hijos, cuando se decide la licenciatura y la escuela a la cual asistir, cuando se decide dejar a las personas que no queremos, y así muchos momentos que por muy pequeños que parezcan o inconscientemente los decidimos, son momentos que nos reinventan.

He pensado mucho en esta palabra, buscándole un significado, tratando de adaptarlo a esta situación que vive el mundo, porque es un claro ejemplo, un golpe en la cara que hasta el mundo se está reinventado, que nos está reclamando algo, que por naturaleza le pertenece, y que nosotros como humanos, como personas, somos frágiles, no somos indispensables, ni siquiera el más rico, el más poderoso, sea quien sea, el mundo nos está pidiendo un nuevo comienzo.

¿Pero qué comenzamos?,  lo que sea que uno quiera, pero que sea con el sentimiento total de sabernos íntegros, congruentes, y posiblemente puede ser que no tengamos claro desde el inicio la meta u objetivo, solo es comenzar a movernos, a integrarnos en actividades que nos permitan desempolvarnos, empaparnos en nuevos temas, con nuevas ideas, con una apertura de mente que permita acercarnos a nuevos valores, a adquirir nuevos conocimientos, porqué en lo nuevo puede estar lo que buscamos, o confirmarnos que lo que hacemos era lo que queríamos, o simplemente es un aprendizaje.

En efecto, todos los días son una oportunidad de reinventarnos, de hacer algo distinto que transforme nuestro entorno, nuestro ambiente, que sea la oportunidad de adquirir valores que nos hagan mejores personas, mejor comunidad, mejores familias; es momento de hacer una introspección, para modificar mis pensamientos, mi comunicación y salir de esa famosísima zona de confort, y esto no es cambiarnos el corte de pelo, pintarnos las uñas, cambiar la ropa, no banalidades, aquí no, esto es a profundidad, es conocernos a nosotros mismos, y desechar y adquirir, por muy cliché que suene, pero así es.

El mundo nos puso la oportunidad más clara, está en nosotros hacerle caso, o dejarlo pasar, pero tomemos este gran motivo, y modifiquemos lo que ya identificamos que no nos aporta y genera valor, reinventemos, lo que queramos para nosotros, lo que queremos dejar de legado, la marca que queremos ser, siento que por mucho que he escuchado últimamente, no es moda, es momento de reinvención.

Roma, una ciudad que reinvento al mundo.
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